sábado, 14 de marzo de 2009

Sugestión emocional ( VII )

Acabo de llegar a casa de tomar algo con unos amigos, para celebrar que una compañera se cambia de trabajo. Y un acontecimiento que ha ocurrido, me ha dado ganas de escribir un rato.

Estaba de camino al metro Palos de la Frontera, paseando por delicias en esta noche con una temperatura agradable, viendo pasar los coches, fijándome en los escaparates y cruzando miradas con la gente que andaba como yo por la calle.

De repente, veo algo que me llama la atención. A medida que iba caminando me dejaba ver que era una manta lo que me había llamado la atención. Y debajo de ella, tumbado y fumando, estaba una persona, que por desgracia, vive en la calle. Y con un simple gesto de saludarme con su mano izquierda, me ha arrancado de mi rostro una sonrisa de complicidad, mientras mi mano automáticamente le ha devuelto el saludo.

4 comentarios:

  1. El problemad e las personas sin hogar es que no reciben la atención adecuada ni en el momento adecuado. Esta desatención lo lleva a la falta de esperanza, a la desconfianza y al deterioro.
    Cuando llega a la calle, al principio lo único que necesita es un trabajo digno y una vivienda digna.
    ¿Dónde estan los fondos destinados a la inclusión de los más desfavorecidos de la Unión Europea, de España, de las Comunidades y de los Ayuntamientos? Me pregunto yo.
    Estrella del Norte

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  2. Sobrevir en la calle es una azaña que pocos logran. Y los que lo hacen, suelen terminar en unas condiciones deleznables, física y psiquicamente.
    Ante esta situación tan dramática, a veces me siento egoista por no aportar mi garnito de arena, para todos aquellos tanto lo necesitan.
    Antares

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  3. Vivir en la calle debe ser lo más duro que le puede pasar a una persona, o al menos eso cero yo,las instituciones no deberían permitir que eso pase, pero los gobernantes con buenos sueldos y buenas camas lo ignoran, dicen que la economía no permite más, cosa que yo no me creo ya que el dinero lo gestionan para lo que quieren. Seguro que la persona que viste, en otro momento, tubo o tiene una familia, quizás, hijos, nietos, esposa, pero el infortunio de la vida le habrá llevado a esa situación, quizás no por voluntad propia.Eres muy observador y eso me gusta,sobre todo la sensibilidad que demuestras en tus escrito. Sigue así
    Sirio

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  4. Las personas obligadas por las circunstancias a vivir en la calle, ponen en evidencia la fragilidad de nuestras vidas.
    Basta una cadena de circunstancias penosas para que nos despojen temporalmente de todo aquello que formaba un edificio de aparente seguridad.
    Sin embargo, hay gente que ha optado por vivir en la calle y dormir bajo las estrellas.
    Estrella del Norte

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