viernes, 26 de febrero de 2010

¿De qué estás hecho?

Hoy será una entrada breve, porque el producto que pasaré a analizar será muy sencillo. Se trata de la Manteca de Karité. Se trata de una grasa extraída de la nuez que produce el árbol de karité, que crece de forma espontánea en la sabana de África central y occidental. 

Para mí es un prodigioso descubrimiento, porque no sólo evita que se deshidrate la piel, sino también se utiliza como máscara hidratante para el pelo, anti-arrugas, anti-estrías y se puede usar como sustitutivo de la cortisona con unos resultados increíbles. Se utiliza incluso en alimentación.

La única pega que se puede encontrar es que la manteca es muy pastosa, casi sólida, pero a una temperatura de 27ºC se consigue que se vuelva líquida (simplemente frotando los dedos), como aceite. 

Ahora voy con la parte que me atañe, sus ingredientes. Aquí os adjunto una fotografía para que lo podáis comprobar con vuestros propios ojos.



Butyrospermum parkii, es decir nueces de karité y nada más. Así de sencillo.


Vía Naetura

2 comentarios:

  1. Jajaja, bienvenido al club...
    Mi último descubrimiento ha sido el E-120 (colorante alimenticio extraído de la cochinilla) y otro similar, extraído también de un nada apetecible insecto (como decía Cervantes: "del que no quiero acordarme").
    Se trata de colorantes naturales (y tan naturales... como la vida misma!) aptos para vegetarianos (será porque los susodichos se nutren de plantas vegetales?).
    Tenía pensado escribir sobre estos colorantes y conservantes que nos añaden amablemente con letras y números para que estemos bien informados... algún día lo haré.

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  2. Gracias :D

    Ese colorante me suena, le algo alguna vez sobre la cochinilla. No estaría mal ese post sobre los colorantes y conservantes.

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